Hay muchas razones para protestar contra Wal-Mart

No hace muchas horas, la resistencia civil pacífica contra la imposición tomó todas las sucursales de la cadena estadunidense de mercados Wal-Mart de la Ciudad de México -todas: las más de 20 que son-; todas se vieron forzadas a cerrar por el día de hoy. Lo mismo ocurrió con algunas sucursales de Puebla, Acapulco y Chilpancingo.
La toma de los Wal-Mart sirvió para llamar la atención pública sobre el hecho de que el accionista mayoritario de la empresa, Manuel Arango, es un delincuente electoral cuyo dinero pagó, durante los meses pasados, publicidad que combatía al candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador.
En La hora del pueblo, Mariana Guerra relata cómo "los empleados del Wal Mart de Universidad y Taxqueña se acercaron a (la actriz) Jesusa Rodríguez y le dijeron que los obligan a trabajar 11 horas diarias y que no cobran horas extras. Estaban tan emputados contra sus patrones que terminaron gritando '¡Sufragio efectivo, no Calderón!', a lo que la gente les contestó: '¡Se ve, se escucha, cajeros en la lucha!'".
Se puede derrotar al enemigo. En Alemania, los norteamericanos tuvieron que vender sus 85 filiales a los alemanes de Metro. Más abajo ofrecemos ejemplos del comportamiento laboral injusto (y hasta ridículo) de Wal-Mart, a quien, sin embargo, el gobierno mexicano prefiere recompensar otorgándole el permiso de abrir un banco en nuestro territorio, logro que no ha obtenido la empresa ni siquiera en Estados Unidos.
Hay muchas razones para protestar contra Wal-Mart.

Wal-Mart: el lobo disfrazado de oveja
Eva Usi
Deutsche Welle
18 de marzo de 2005
El intento de Wal-Mart de imponer un código de conducta a sus empleados en Alemania ha sido recibido con críticas, burlas y demandas. Se teme que detrás está en realidad la competencia brutal por el mercado.
Tanto plantilla de trabajadores, como confederación de sindicatos de servicios e incluso hasta la prensa alemana ha reaccionado con enojo y repudio ante la iniciativa del gigante estadounidense Wal Mart, de imponer un código de conducta a sus trabajadores.
El pasado mes de febrero los 13.000 empleados de la cadena recibieron, junto con su cheque de pago, un código de conducta de 28 páginas en el que se les prohíbe categóricamente todo tipo de comunicación que pueda ser interpretada como acercamiento sexual.
Ni miraditas coquetas, ni bromitas de doble sentido. No pueden salir en pareja en horarios fuera de trabajo, tampoco recibir regalos ni tener una relación amorosa con alguno de sus compañeros. Peor aún tratándose de un subalterno o jefe. El no respetar el código puede conducir al despido. La empresa también exhortó a los trabajadores a reportar de manera anónima toda violación a los lineamientos a través de una línea telefónica, “Ethik-hotline”, instalada para tal propósito.
Burlas y enojo
En Alemania, donde las costumbres son más liberales y tal vez directas que en Estados Unidos, el asunto ha provocado desde risa hasta enojo. Los empleados recriminan al consorcio que intente imponerles la abstinencia sexual y se rebelan contra el intento de controlar su vida amorosa y privada. Indigna que los directivos hayan hecho traducir los lineamientos del inglés de manera literal al alemán, sin considerar las normas y tradiciones existentes en este país.
El caso ha ido a parar hasta el Tribunal de Wuppertal, ciudad en donde el grupo tiene su sede en Alemania. El consejo de empleados acusa a la directiva de violar claramente el principio de cogestión, uno de los pilares de la filosofía empresarial alemana (y por cierto exitosa fórmula desde el llamado milagro económico alemán), según el cual, todas las decisiones importantes de una empresa tienen que tomarse conjuntamente por patronal y sindicato. “El código ético de Wal-Mart es resultado del puritanismo estadounidense y del miedo existente en dicho país a las demandas de compensación de los empleados, pero no toma en cuenta el derecho laboral alemán”, dice la representante del consejo de empleados, Elke Richards.
Una moral mal entendida
“El acalambrado intento del consorcio estadounidense de americanizar la filosofía empresarial en Alemania ha tenido un estrepitoso fracaso”, comentaba el diario regional de Saarbrücken, en el Sarre. El diario señala que en realidad detrás de la iniciativa se encuentra algo mucho más serio y peligroso que la loca idea de un jefe del otro lado del Atlántico, que confunde bajo el término de ética un comportamiento moral anticuado que no tiene nada que hacer en Europa. En juego está la competencia por los precios más bajos, una batalla por el mercado, por los horarios de apertura de las tiendas, una lucha que cada vez más recae sobre los hombros de los empleados.
El diario Financial Times Deutschland señala que el mayor consorcio comercial del globo no está haciendo buen negocio en Alemania. La situación del grupo nada tiene que ver con el rosado panorama que pinta el director del grupo en Alemania, Kay Haffner. La cadena tendrá que cerrar una filial en junio, precisamente en Sarre, que cuenta con 100 empleados. Debido a las fuertes pérdidas registradas la cadena ha cerrado dos filiales en Solingen y Erkelenz, en la parte occidental de Alemania, durante los últimos años. Actualmente el grupo cuenta con 90 tiendas.
En Alemania donde los derechos de los trabajadores son protegidos a capa y espada, la prensa alemana exhorta a políticos y sindicatos a estar atentos, pues la crisis económica no amerita el extender un cheque en blanco a las grandes cadenas de tiendas, menos aún cuando éstas disfrazan sus verdaderas intenciones bajo una ética mal entendida.

Wal-Mart se despide de Alemania
Claudia Herrera Pahl
Deutsche Welle
28 de julio de 2006
Wal-Mart uno de los consorcios más grandes del mundo, con presencia en 15 países, pone fin a 8 años de esfuerzos para colocarse en el mercado alemán y vende sus 85 filiales al gigante germano Metro.
El mercado minorista alemán tiene fama de ser muy difícil, pero en el caso de Wal-Mart fueron errores de estrategia los que lo hicieron fracasar.
El coloso estadounidense cuenta a nivel mundial con cerca de 6.500 mercados, más de 1,8 millones de trabajadores y según información propia 175 millones de clientes a la semana.
Además de Estados Unidos, Wal-Mart tiene presencia en Gran Bretaña, Canadá, China, México, Brasil, Argentina, Puerto Rico, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Japón.
Desconocimiento del mercado
Los estrategas de Wal-Mart demostraron poco conocimiento y respeto de las reglas del juego comercial en Alemania y se equivocaron al creer que el marketing estadounidense podría extrapolarse simplemente al país europeo. Además se equivocaron en su política de adquisición de plazas y también en la de personal.
El gran éxito de Wal-Mart en Estados Unidos y otros mercados es la constante expansión que le permite su enorme poder de adquisición. En Alemania es muy difícil alcanzar este ritmo de expansión debido a una serie de restricciones legales.
Por ejemplo, está prohibido el dumping, es decir, la oferta a largo plazo de mercancía por debajo de su precio de compra. Esta prohibición evitó que Wal-Mart y su enorme poder financiero pudiera "robar" los clientes a los minoristas ya existentes.
Fracaso programado
Pero no fue la resistencia del comercio minorista alemán el problema principal. En 1997 Wal-Mart compró 21 filiales del consorcio Wertkauf, una cadena exitosa que aseguraba ganancias jugosas. Sólo un año después se realizó una adquisición que le costaría la plaza germana.
Según cifras publicadas por el periódico Frankfurter Allgemeine, pagó 560 millones de euros por 75 supermercados "Spar", de fama regular y emplazados en lugares de difícil acceso. Spar mismo había pagado dos años antes sólo 85 millones por estos almacenes.
Esta adquisición fue una de las principales causas de las pérdidas acumuladas por la compañía que ascienden a mil millones de dólares.
A donde fueras…
Otro error fue despreciar la experiencia local. Rob Tiaras, que en Estados Unidos supervisaba 200 almacenes, dirigió hasta el 2001Wal-Mart Alemania. Fue hasta 2001 cuando se decidió que asumiera el mando el alemán Volker Barth, pero para ese momento la empresa ya tenía enormes conflictos con los sindicatos y mala fama en la opinión pública germana.
La política de personal del gigante estadounidense ocupó varias veces los titulares de la prensa. El tribunal prohibió a la empresa implementar en Alemania parte de su código de conducta para empleados. Negó al consorcio la posibilidad de poner una línea de teléfono en la que los trabajadores pudieran "delatar" las violaciones por parte de colegas del código de comportamiento. También las regulaciones que prohibían relaciones amorosas entre el personal fueron rechazadas por la corte.
Los perdedores
Aunque los minoristas se alegran de la retirada de Wal-Mart las consecuencias podrían ser menos agradables para los 11.000 trabajadores de la empresa, pues su nuevo patrón, Metro, podría optar por cerrar algunas filiales habida cuenta de que sus almacenes Real Markt cubren ampliamente todo el territorio germano.

Wal-Mart despierta suspicacias en México
Diego Ayala
Excélsior
30 de julio de 2006
El año pasado, Wal-Mart intentó por cuarta ocasión abrir un banco en Estados Unidos. Versiones periodísticas dan por hecho que la cadena de tiendas de autoservicio abrirá una institución financiera en México.
El primer paso que dio en EU, y que luego se replicó en México, fue el servicio de entrega de dinero en caja, así como el otorgamiento de crédito en sus tiendas.
Lo que es un hecho es que Wal-Mart quiere abrir un banco para reducir los costos de los millones de pagos que la compañía procesa cada año, afirma Robert Reich, profesor de finanzas públicas de la Universidad de California, en Berkeley.
En un comentario que hizo a la National Public Radio (NPR), señaló que la solicitud que realizó Wal-Mart en el segundo semestre de 2005 a las autoridades financieras estadunidenses está ahora en manos de la Federal Deposit Insurance Credit (FDIC).
Será en un par de meses cuando el equivalente a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) en Estados Unidos decida si la autorización procede.
Wal-Mart quiere expandir su negocio financiero a otros mercados y donde pretende comenzar es México, dice Eduardo Estrada, analista de Accival Casa de Bolsa.
Sí hace sentido que Wal-Mart pretenda abrir un banco en México, agrega el experto, pues 30 por ciento del total de sus ventas son a crédito. Además, ya cuenta con su tarjeta de crédito, la cual es administrada por BBVA Bancomer.
Otra posibilidad, dice Estrada, es que, como ya sucede en Estados Unidos, Wal-Mart se enfoque al negocio de las remesas.
A diferencia de Estados Unidos, en México ninguna de las autoridades ha hecho público el interés de Wal-Mart por abrir su banco.
Eso ha creado suspicacias, pues por un lado las filtraciones periodísticas dan por un hecho que ya tiene el permiso de la Secretaría de Hacienda, y por otro la empresa y las mismas autoridades guardan silencio.
En EU tanto la FDIC como la Comisión de Valores (SEC, por sus siglas en inglés) ya hicieron públicas las intenciones de Wal-Mart para abir bancos en diversos estados de la Unión Americana.
El papel de los intermediarios ha sido informar a la ciudadanía el proceso que se sigue al respecto.
En México la situación es un enigma, sale a la luz pública hasta que las negociaciones terminan.
Miguel Ángel Garza, vicepresidente de Supervisión de Instituciones Financieras de la CNBV, comenta a Excélsior que el proceso para autorizar a un banco es muy complejo y tarda muchos meses.
Explica que los interesados deben enviar a la SHCP paquetes de información donde se analiza con mucho detalle la viabilidad o no del proyecto, así como la calidad moral del solicitante, entre otros conceptos.
Una vez que se autoriza la licencia, pasan otros seis meses para que el banco deba cumplir con los requisitos tecnológicos, de regulación y pase la etapa de pruebas, dice Garza.
Banco Autofin México, uno de los bancos que acaban de iniciar operaciones, solicitó ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) su licencia para ser banco desde principios del 2005 y fue hasta diciembre del mismo año cuando la autoridad le dio el visto bueno. Siete meses después comenzó a operar. La misma suerte corrió Prudential Bank, que a finales del 2005 ingresó sus papeles a la SHCP y aún no recibe una respuesta.
Antonio Ocaranza, vocero de Wal-Mart de México (Walmex), dice que no han comentado ni emitirán información alguna al respecto.
"Sin lugar a dudas, Wal-Mart sería el jugador más grande del sistema financiero, y por mucho. De darse, sería algo muy positivo que mejoraría la competencia en el mercado pues los bancos más grandes tendrían que bajar sus costos para poder competir con un gigante mundial como es Wal-Mart", dice por su parte Sebastián Hoffmeister, especialista en el mercado de autoservicio de Moody's en México.
En Estados Unidos, Wal-Mart representa el 10 por ciento del total de las ventas al detalle en Estados Unidos, mientras que en México, según el reporte de Accival Casa de Bolsa, la cifra alcanza hasta 64 por ciento.
Ante esta situación, con tres mil 900 tiendas en Estados Unidos y 817 en México, pondría a temblar a sus competidores.
En este contexto, abogados estadunidenses le exigen a las entidades reguladoras de ese país que le nieguen a Wal-Mart la licencia para operar en algunos estados, como Utah (donde comenzó la historia en 2002), Ohio, Washington, Hawai, Virginia, Kansas, Missouri, Nevada, entre otros. Además, en California ya se le negó definitivamente la licencia. Temen que un monopolio acabe con los pequeños banqueros.
Por si fuera poco, se han opuesto a la medida la Asociación Nacional de Tiendas de Conveniencia, la Asociación Nacional de Minoristas, así como bancos locales y regionales. La lista de estos procesos que guarda la Comisión de Valores de EU es infinita, y pública en la red.
Entretanto, el analista de Accival recordó que durante la inauguración del Banco Autofin México, el secretario de Hacienda, Francisco Ortiz, comentó que ya no se iban a autorizar más bancos en el país por el resto del sexenio.
¿Será cierto?