viernes, enero 26, 2007

Primer plano 2007/01/22

El programa de televisión Primer Plano es transmitido por el Canal 11 del DF -XEIPN TV, canal del Instituto Politécnico Nacional- todos los lunes a las 10 de la noche.
Dentro del programa se confrontan las opiniones de diversos analistas en torno a la actualidad política nacional.
Síntesis de la emisión del lunes 22. En el primer bloque se indagan las causas del gobierno federal para extraditar a los narcotraficantes a Estados Unidos. Algunos analistas se enfocan en la debilidad del gobierno mexicano para controlar los penales y las cárceles, en comparación con la fortaleza del sistema penitenciario estadounidense.
En el segundo bloque se critica la administración de Felipe Calderón, presidente de México, por la vaguedad en el manejo del incremento en el precio de la tortilla, basado en la firma del llamado “Pacto de la tortilla”, pues el gobierno se concentró en el combate del narcotráfico e ignoró las especulaciones económicas.
En el tercer bloque los panelistas se pronuncian contra la discriminación e intolerancia de varios sectores de la sociedad hacia la homosexualidad y las personas con capacidades diferentes, fenómeno sobre el que varios intelectuales se expresaron en diversos medios de comunicación.
En el cuarto bloque se habla del reacomodo de los partidos políticos tras diversos conflictos internos. Se concluye que éstos son resultado de la actitud de los militantes, quienes, al recibir un presupuesto excesivo, pierden su sentido de pertenencia.http://www.youtube.com/watch?v=9TLP3fJwtpc
http://www.youtube.com/watch?v=OAENBSe1U7U

Versión estenográfica

FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Muy buenas noches, amigas y amigos de Primer Plano. Estamos en un programa más hoy 22 de enero, empezando el año y con una noticia muy importante que se difundió el fin de semana.
El Gobierno de México, a través de la Procuraduría y de la Secretaría de Relaciones Exteriores, de la Cancillería, exiliaron, no exiliaron, perdón, mandaron a los Estados Unidos, tampoco deportados, -se me fue la palabra- extraditaron a 15 delincuentes de alta peligrosidad; diez de ellos capos muy importantes del narcotráfico, la mayor parte; y cinco criminales también de alta peligrosidad pero que están dedicados a otras cosas que no son narcotráfico como trato de personas. Hay dos asesinos que cometieron crímenes fuertes en Estados Unidos, y en fin.
Hay una discusión en curso de si está extradición respetó los derechos constitucionales, la legalidad y si se hizo de acuerdo con la ley, hasta donde mi información llega, sí fueron extraditados de acuerdo con la ley.
Sin embargo, hay también una interpretación más en el orden político de que esto muestra una cierta debilidad del Estado Mexicano que dice de alguna manera indirectamente que no puede controlar a los capos.
Yo creo que ésta es una interpretación que a mi juicio no es la más aceptable, porque siendo una posible interpretación también el reconocimiento de lo que se puede hacer y de lo que no se puede hacer es base de una buena decisión; yo creo que fue buena decisión la de extraditarlos.
Pero también habría que decir que una parte muy importante del narcotráfico es debida a los Estados Unidos, el mercado más grande del narcotráfico que hay en el mundo. Recibe alrededor del 70 por ciento de la droga que se vende en el mundo, se vende en el mercado norteamericano, lo cual es algo verdaderamente extraordinario.
Y eso hace que este país tenga una responsabilidad especial, que es un país especialmente rico, también que tiene capacidad para poder controlar esto que en México cuesta mucho trabajo, como hemos visto con la fuga de capos, con la constante corrupción de los penales, en donde están teniendo privilegios, en donde es imposible que con estos cañonazos no de 50 mil pesos como decía el General Obregón, sino de 5 millones de dólares o de muchos millones de dólares, éstos puedan estar disolviendo instituciones, rompiendo las cárceles, volviendo parte de su imperio y seguir operando aquí a través de muchos recursos que tienen y que en Estados Unidos no van a tener.
Claro que esto entraña riesgos, y con eso termino, porque se puede venir una reacción de estos poderosísimos capos que pongan al Estado Mexicano en situaciones muy difíciles.
El Procurador de la República ha declarado que está preparada la nación para hacer frente a estas violencias posibles de los narcotraficantes, pero yo creo que ahí tenemos que tener muchas precauciones y hay un temor de que pueda haber una reacción muy amplia.
LORENZO MEYER COSSIO: Pues si está preparado es una sorpresa para mí, porque no parece que estuviera preparado para nada.
Dices que no es una muestra de debilidad pero a la vez das toda una lista de debilidades. Dices: los mandan allá porque aquí no los pueden controlar, porque tienen privilegios, porque se escapan de las cárceles, porque realmente no los podemos controlar.
Yo creo que sí es una muestra de debilidad de que el Estado Mexicano no puede controlar una de sus instituciones básicas: las cárceles. Y los norteamericanos sí pueden, es un Estado fuerte; este es un Estado débil.
Por otro lado, yo no sé cuál es la respuesta al narcotráfico, le he dado vueltas y vueltas; lo pienso, no encuentro cuál es la respuesta, hay que hacer algo, el Estado tiene que hacer algo. Y encontró que lo más lógico para ellos, me refiero a Felipe Calderón y al grupo que está ahora al frente del Gobierno Mexicano, es dárselos a los norteamericanos y decirles son ustedes responsables en parte de lo que pasa, aquí les mando esto.
Pero desde la perspectiva de un Estado Soberano es un poco extraño que se manden a otro país, a que se les juzgue cuando todavía no terminan sus condenas aquí. En realidad si tuvieran cien años de vida o algo así tendrían que estar aquí, irse allá y regresar acá.
Hay algo también de muestra de debilidad de soberanía, el hecho de que ¿los norteamericanos nos han mandado alguna vez a alguien que haya cometido un delito aquí en México, que esté allá en la cárcel y que nos lo manden para regresarlo a la cárcel norteamericana?
JOSE ANTONIO CRESPO MENDOZA: A Montemayor, Rogelio Montemayor. Hay otros casos.
LORENZO MEYER COSSIO: ¿Era para que purgara aquí algo y luego…?
JOSE ANTONIO CRESPO MENDOZA: Para presentarse en los tribunales aquí y resultó exonerado.
LORENZO MEYER COSSIO: A lo mejor los exoneran a ellos allá; pero no hay duda de que es una debilidad. Y la reacción.
Yo soy un poquito menos duro en relación a la reacción. Los capos colombianos que todavía hace dos días pusieron una bomba en un sitio público y que mataron por lo menos a un par de personas, hicieron toda una campaña de las bombas para evitar la extradición, pero una vez que la extradición ya se dio y eso ya pasó en México, entonces no tienen sentido las bombas, las bombas son para detener algo, los narcotraficantes son muy fríos y lógicos.
La guerra que vayan a hacer no va a tener necesariamente las mismas características que en Colombia, no sé qué vayan a hacer, algo van a hacer, pero no ha duplicar o a replicar lo que sucedió en Colombia porque los tiempos ya son otros, aquí ya ocurrió.
¿Qué pueden hacer? ¿Poner bombas qué les traería?
JOSE ANTONIO CRESPO MENDOZA: Sin embargo, es cierto lo que dices Lorenzo, ya pasó. Pero otros se quedan.
Cuando vino lo de la cuestión de los extraditables en Colombia, los extraditados con Virgilio Barco, se desató una violencia tremenda y decía Pablo Escobar, uno de los principales narcotraficantes colombianos “más vale morir en una cárcel colombiana que irse a Estados Unidos”.
Y de hecho murió en 1993, precisamente enfrentándose a las autoridades colombianas con tal de no ir a los Estados Unidos a purgar sus penas.
Es algo que para los narcotraficantes es muy duro, porque saben que en las cárceles latinoamericanas se pueden ir al cine y de pronto decidir no regresar, como pasó hace 6 años con el “Chapo” Guzmán.
Entonces lo que pasó en Colombia, yo no lo descartaría completamente de que pueda volver a pasar en México, porque tal vez los que ya se fueron, esos ya no, pero vienen otros.
En primer lugar, dejan un cierto vacío de poder en los propios cárteles que genera violencia entre ellos, pero también esos mismos le elevan el costo al gobierno mexicano como se lo elevaron al gobierno colombiano, de decir bueno ya mandaste unos pero conmigo no, entonces viene una violencia muy fuerte. Por lo menos esa fue la experiencia colombiana.
Cuando más violencia hubo contra agentes del Estado, contra los jueces que son los que determinan, incluso luego apareció esta figura de los jueces sin rostro…
LORENZO MEYER COSSIO: Enmascarados.
JOSE ANTONIO CRESPO MENDOZA: Precisamente, entonces es contra el Poder Judicial en ese caso y Virgilio Barco que fue el que aceptó las extradiciones en Colombia, después finalmente pactó y absolvió a muchos de los capos de los delitos cometidos allá para reducir y disminuir la violencia social que desataron los capos contra los agentes del Estado, pero también contra la sociedad civil.
No sé si eso vaya a ocurrir aquí en México o no, son otras circunstancias, tampoco hay que descartarlo tan fácilmente como lo ha hecho Eduardo Medina Mora, diciendo no porque son otras circunstancias y no somos Colombia. Pues sí pero estamos en una situación muy parecida.
Y otro punto nada más. También Fox extraditó, extraditó al “Kitty” Páez precisamente hace 6 años y el embajador entonces Jeffrey Davidow también recibió como ahora, de parte de Estados Unidos, con mucho beneplácito y dijo eso los va a ayudar a deshacerse de ese lacerante mal que es el narcotráfico y no pasó eso.
Ya lo sé, que en ese caso fue un lugarteniente del cártel de Tijuana el “Kitty” Páez y ahora son diez, es decir la magnitud del operativo ahora, la magnitud de la escisión es mayor.
Pero los efectos contraproducentes de eso que vimos en Colombia, no hay que dar por descartado que puedan ocurrir en México, por lo menos como previsión.
SERGIO AGUAYO QUEZADA: Yo estaba igual que tú, Lorenzo, intentando no especular sobre lo que se puede hacer porque eso es relativamente poco en este momento, sino cuál es la estrategia del Gobierno Federal Mexicano. ¿Qué está buscando?
Porque la prioridad que le ha dado al combate al narcotráfico, a la producción, tráfico y consumo en mucho menor medida de drogas es enorme, pero realmente a donde va. En primer lugar lo positivo.
Creo que en relación a otros gobiernos este gobierno está lanzando una ofensiva, está involucrando al ejército contra todos los cárteles, es decir no hay aquella selectividad que tanto se les criticó a otros gobiernos que golpeaban a uno para que floreciera el otro, y así se la iban llevando entre el cartel de Juárez, el de Tijuana o Pacífico, el de Michoacán o el del Golfo.
En este caso pareciera que están realmente en una ofensiva sistemática: Michoacán, Guerrero, Baja California, ahora el Triángulo dorado, falta Tamaulipas, para que se completen los estados de mayor riesgo. Hasta ahí estaría bien.
Luego viene esta medida sorpresiva, un tanto sorpresiva de decidir extraditar de manera muy repentina a los capos que supondría está buscando reducir la capacidad de coordinación o de liderazgo que tienen los cárteles, parecería. Pero en el último de los casos ¿cuál es el objetivo?
Creo que lo que falta o al menos lo que no conocemos es ese marco global, es esa estrategia a seis años cuando menos que nos diga vamos a golpear a los carteles para resquebrajarlos, que es una lógica, en Estados Unidos lo que han hecho es reducir el tamaño de los cárteles simplemente para que sean más manejables…
JOSE ANTONIO CRESPO MENDOZA: También en Colombia.
SERGIO AGUAYO QUEZADA: En Colombia es la misma estrategia.
Tal vez eso están buscando, no desaparecer la droga, eso es imposible, pero creo que falta una comprensión mejor no sólo para lanzar un apoyo acrítico, porque lo que quiere ver es que apoyemos a ciegas medidas, lo cual podría hacerse como una reacción anímica de qué bueno que se está haciendo algo, pero para un análisis que quiere trascender los encabezados de ocho columnas, como el que hacemos aquí, es muy difícil porque desafortunadamente este gobierno está demostrando que quiere hacer algo, pero sin explicarnos cómo se inserta ese algo o esos algos, ya van dos, dentro de una visión más amplia.
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Lo que pasa es que es muy difícil Sergio, explicar una estrategia de combate al crimen organizado que tiene tantos recursos, es darles pitazos.
SERGIO AGUAYO QUEZADA: No, perdóname, no.
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: No, nada más déjame terminar.
Yo creo que efectivamente se pueden decir algunas cosas en términos muy generales y hay otras que se deben callar para que puedan tener cierta eficacia. Es muy claro que no van a poder terminar con la droga con ninguno de estos operativos, ni con las extradiciones; son partes de una estrategia que vamos ir viendo a partes, pero también pedir que se le informe de la estrategia, es estar convocando que se desarrolle una contra estrategia.
LORENZO MEYER COSSIO: Pero sí se les informa, claro que se les informó de antemano, se dijo va a ser en estos estados, hasta nosotros lo sabíamos, imagínate…
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Yo digo las extradiciones. Hay varias cosas que no se pueden estar diciendo.
LORENZO MEYER COSSIO: Es como si tú planeas una guerra y dices en realidad vamos a empezar la guerra y la operación va a ser aquí y allá.
¿Cómo se sabe cuándo termina la guerra del narcotráfico? Nadie lo ha sabido, al final es el consumo, no la producción.
Nosotros estamos poniendo el énfasis en la guerra a la producción que nadie la ha ganado, no la ha ganado ni el ejército norteamericano que está en Afganistán, porque ellos son los que realmente dominan militarmente Afganistán, y lo que tenemos como información de Naciones Unidas es que la producción de opio de Afganistán va para arriba, cuando los norteamericanos tienen a su ejército ahí. Pues si ellos no pueden, nosotros tampoco.
SERGIO AGUAYO QUEZADA: A lo que me refería, primero que por supuesto que sí se puede, hay un planteamiento estratégico, te podría citar documentos en Estados Unidos en los cuales se dan los objetivos generales, un planteamiento general y la operatividad, la forma como se va a implementar; la inteligencia, eso por supuesto no se dice.
Porque la crítica que hacía Lorenzo quisiera profundizarla, parecieran ser medidas muy reactivas para apaciguar por lo pronto a una sociedad justificadamente asustada y preocupada con un operativo muy espectacular, lanzar al ejército es una apuesta del todo o nada, o ganamos o ahí perdemos la única institución sólida que tenemos, que tiene el Estado.
En segundo lugar, los extraditables es una medida para apaciguar a los estadounidenses que es claro desde los 60’s, desde el ‘69 para dar una fecha precisa, la “Operación Interceptación”, cuando cerraron la frontera, nos han impuesto la estrategia de combate a las drogas.
Vamos, se puede conocer la estrategia del gobierno mexicano a través de documentos norteamericanos más fácilmente.
A lo que me refería era ¿y la doctrina mexicana en dónde está? Lo cual no es de ninguna manera el sugerir que el Estado Mayor o la Sección Cuarta de la Secretaría de la Defensa Nacional presente en televisión la inteligencia sobre el siguiente operativo. No es eso.
Es para obtener el respaldo ciudadano, no sólo las emociones, sino el respaldo inteligente o analítico, requieren informar, dar más información sobre esos objetivos generales.
Coincido con Lorenzo ¿Cuándo termina la guerra contra las drogas?
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Una aclaración pequeña respecto de lo que decía Lorenzo.
Yo empezaba este bloque diciendo que, efectivamente hay una interpretación -que no es la mía- pero que dice que hay una debilidad, yo argumentaba otras.
También dije que el estar midiendo la capacidad que uno tiene, el sentido de proporción es una buena base de decisión, que es la que está detrás de esto.
Esto implica que hay una debilidad si comparas al Estado Norteamericano y su capacidad, su ejército, por supuesto es casi de Perogrullo reconocer que hay una debilidad relativa. Pero también habría que reconocer que cuando tú eres débil y encuentras una forma para combatir algo que hay que combatir, esto es positivo y es válido ¿no?
JOSE ANTONIO CRESPO: Regresamos.
LORENZO MEYER COSSIO: Pues bien, en este segundo segmento vamos a hablar de pactos.
En el caso de los españoles una vez que entraron a la democracia hubo el Pacto de La Moncloa. Bueno, ahora nosotros andamos con el “Pacto de la Tortilla”, ese es nuestro pacto aquí, que tienen algunas cosas parecidas a lo de La Moncloa, que es un problema económico que hace que los adversarios se sienten a dialogar.
Pero bueno, la tortilla no es nada que desdeñar, después de todo México, Mesoamérica, es el origen del maíz, es el competidor del trigo, visto en miles de años de civilización, es el centro de la dieta mexicana.
Y de repente les estalló, digo les estalló primero al Gobierno, pero nos estalló a todos nosotros después, el problema de un alimento básico que sube pero rapidísimo, en lo que se suponía era un ambiente estable.
Se nos venía anunciando desde hace buen tiempo no solamente con el nuevo régimen, sino en la anterior que ya habíamos llegado a ese punto de que la macroeconomía estaba bajo control, nada de inflación, ahora había otros problemas, pero ese no. Sin embargo aquí ya se disparó.
Entonces, recordamos inevitablemente esos momentos de crisis después del 82, del 82 al 88 cuando Miguel De la Madrid tenía que tomar las decisiones sobre la marcha. Y, entonces vienen los pactos, los pactos en donde el Gobierno, el sector privado, los trabajadores se ponen de acuerdo para tratar de detener al monstruo.
En este caso el monstruo es la subida en el precio de las tortillas, que puede anunciar otras subidas. Es el disparador o puede ser el disparador.
Entonces llegan al punto culminante: un kilo de tortillas que antes valía entre seis y siete pesos ahora llega a los 8.50. Bien, pero a diferencia de los otros pactos, aquí nada más entró un grupo muy pequeño de una cantidad enorme de puntos de distribución de la tortilla, que es donde se ve si tiene o no sentido el acuerdo, y nada más una minoría de distribuidores aceptaron.
Está en estos momentos, es muy reciente para llegar a una conclusión final, pero unos lo están respetando, he visto, hasta hice una pequeña encuesta hoy para ver que tan respetado estaba este pacto, pero otros no lo están haciendo.
Va a salir esto en los próximos días como una prueba interesante, pero y aquí termino, en cualquier caso no deja de ser irónico y extraño que un Gobierno que está casado con el libre mercado, con la no regulación, porque el mercado es sabio, las fuerzas del mercado son las que asignan de la mejor manera posible la distribución de los recursos, pues aquí se interfirió con el mercado de manera clara por razones políticas.
Vamos a ver qué tanta capacidad tiene el gobierno de controlar esto, y uno de los momentos de prueba iniciales es ésta: le van a respetar los distribuidores de tortilla el 8.50, que eso ya significa un aumento enorme; si estaba a siete pesos, que otros estaban a seis, pongamos en siete pesos, entonces es un aumento del 20 por ciento, en una economía que se preciaba de que sus aumentos iban al cuatro.
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Bueno, pero yo creo que sí vale la pena, aún cuando es una buena introducción la que has hecho del Pacto de La Moncloa, diferenciar lo que es una cosa como el Pacto de La Moncloa, que era un pacto para el tránsito democrático, para propiciar el reconocimiento del juego democrático de los partidos, para establecer una amnistía política.
LORENZO MEYER COSSIO: Era un sentido irónico, mí querido amigo.
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: No, ya lo sé, pero yo lo digo para nuestro público oyente que habría que decir que efectivamente el Pacto de La Moncloa incluía cuestiones de tipo económico, detención de huelgas, de aumento de salarios, etcétera, para tener todo un panorama enfrente.
Y no creo que sea poco importante, como tú bien dices, el maíz en México y la tortilla. De hecho yo que vengo de un horizonte cultural maya, no puedo dejar de recordar que el Popol Vuh dice que los hombres estamos hecho de maíz.
Y estamos hechos, lo dice materialmente, lo dice simbólicamente, lo dice como parte de su teogonía y lo dice como parte de su vida diaria y de su alimentación cotidiana que nos va haciendo de una cierta manera, que es distinta de la manera en que se hacen los de la cultura del arroz en Oriente o los de la cultura del trigo caucásicos.
Ciertamente es algo muy importante, y la mayor parte del pueblo mexicano tiene como nutriente principal el asunto de la tortilla, por tanto un pacto sobre la tortilla no es un pacto menor ni poco importante.
Y si no se resuelven esas cuestiones que son tan básicas, tan literalmente básicas, las otras va a ser imposible que se empiecen a resolver.
Es cierto que se ha dado un paso de control, pero también es cierto que no ha habido este control eficaz en todos los ámbitos, y que en algunos lados se sigue vendiendo por arriba de los 8.50.
Ayer escuchaba yo una entrevista de un vendedor de tortillas, de un expendio en el cual decía: no, pues lo estoy vendiendo a nueve porque no hay ninguna ley que me prohíba hacerlo, no hay control de precios. Digo, ahí hay un pacto, pues que lo respeten los que lo hicieron.
Y esto habla de que es una medida que todavía no tiene capacidad suficiente el Estado Mexicano para poderla forzar y llevar a cabo.
SERGIO AGUAYO QUEZADA: Bueno, pero las buenas intenciones siempre se han caracterizado.
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Sirven para adoquinar.
SERGIO AGUAYO QUEZADA: Si bien el Popol Vu habla de que el maíz es el nutriente, estamos hechos de maíz, también estamos hechos de buenas intenciones, sobre todo los gobernantes que de manera tradicional nos recetan una buena dosis de buenas intenciones.
Y desde esa perspectiva, yo quisiera ver la crisis de la tortilla, desde otra perspectiva lo juguetona que puede ser la historia.
Hace mes y medio, dos meses en este programa nos angustiábamos por la crisis política generada por la Toma de Posesión de Felipe Calderón. Y parecía que el conflicto por la limpieza de las elecciones iba a ser la marca, el sello que iba a marcar, al menos los primeros meses de su Gobierno.
Bueno, un mes después, los primeros días de enero surge de la nada -al parecer de la nada- por supuesto hay antecedentes pero nadie se lo esperaba con la virulencia con la que de repente viene el aumento de la tortilla, la novatez del Gobierno Federal. Es decir, creo que venían preparados para combatir narcos, pero no para combatir especuladores de la tortilla.
JOSE ANTONIO CRESPO MENDOZA: He inflación.
SERGIO AGUAYO QUEZADA: Y la inflación, porque su respuesta fue muy titubeante.
Y no sólo eso, aún vamos a ver en qué termina la historia porque una vez desencadenado el espectro de la inflación es como el fraude, es difícil volverlo a meter al cajón, a la cueva donde están recluidos.
No sabemos dónde vaya a terminar y desde esa perspectiva, y menciono otro ingrediente que nadie anticipaba y que mencionaremos o discutiremos en otro bloque, la crisis de los partidos, Sobre todo la crisis al interior del PAN, las divisiones que en diciembre yo francamente no anticipaba la intensidad de esas divisiones.
Así que coincido con Francisco José de que la tortilla sigue siendo una metáfora que captura, condensa nuestras debilidades y nuestras fortalezas también, porque pese a todo sigue siendo el sostén de la existencia de la mayoría de los mexicanos.
JOSE ANTONIO CRESPO MENDOZA: El ángulo político de este asunto se puede ver por varios lados.
Por un lado, mencionabas los pactos de choque, Lorenzo, con Miguel De la Madrid y también con Carlos Salinas de Gortari. Esto no le llamarían un pacto de choque ni siquiera le quieren llamar un control de precios, porque nos remonta al pasado que el propio Felipe Calderón dijo: ese no regresará bajo mi modelo, también lo dijo Vicente Fox en la campaña que le hizo a Felipe Calderón, sino que eso ocurre si gana López Obrador; si ganamos nosotros olvídense de inflación y olvídense de todo eso, control de precios, etcétera. Entonces, no le quieren llamar control de precios pero de alguna manera eso es al poner 8.50 como tope.
Pero el control que tenía Miguel De la Madrid todavía y Carlos Salinas de Gortari de las estructuras corporativas que ya no hay o no está tan claro que lo haya, pone en duda si efectivamente se puede respetar ese acuerdo, si no se va la escalada de precios y salarios, que los sindicatos -como ya lo están pidiendo- no pidan un aumento de salario que corresponda a los aumentos en la inflación no sólo en la tortilla, sino de otros bienes relacionados o de otros alimentos. Eso está en incógnita.
Es decir, van a poder controlar, como de alguna manera sí lo hizo Miguel De la Madrid y Salinas de Gortari para bajar la inflación, no está muy claro.
Y el otro asunto es que desde luego siendo la tortilla la base de la alimentación mexicana, no solamente de los segmentos populares que lo son, sino de todo mundo. Digo, todo mundo come tortillas aquí en México y, en fin, otros productos que pueden estar relacionados con la tortilla, con el maíz.
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Las palomitas de maíz.
JOSE ANTONIO CRESPO MENDOZA: Bueno, las palomas, el huevo porque las gallinas comen maíz también, etcétera, los cerdos que comen maíz.
Bueno, es un punto delicado políticamente, y de hecho ya en una encuesta hecha por Ulises Beltrán, que es un encuestador conocido, ya hay un impacto en la popularidad de Felipe Calderón como Presidente, de que baja de 62 por ciento de popularidad, de buena disposición de la ciudadanía, a 53 me parece.
Y también en otra pregunta de cerca de un 15 a 20 por ciento de reducción, en cuanto a la pregunta de: ¿Puede controlar o está controlando Felipe Calderón la situación del país?
Antes de lo de la tortilla había una posición muy buena, y después de la tortilla ya bajó significativamente. Eso, obviamente, lo sabe el Gobierno y quizá por ello reacciona con la cuestión del pacto de la tortilla para que no se vaya de las manos.
La incógnita sigue siendo, desde mi punto de vista, si de veras va a funcionar o no; si no funciona, políticamente eso tiene una repercusión fuertísima, porque además quien lo puede capitalizar es el movimiento paralelo que es el de López Obrador, que de hecho ya está diciendo de alguna manera: “Se los dije”.
LORENZO MEYER COSSIO: El tema también de la tortilla nos lleva a un punto que desde luego no podemos resolver aquí, pero es el de la autosuficiencia alimentaria, esa gran pugna.
Si México no es capaz de producir maíz a precios competitivos, entonces que deje de producirlo y que lo importe. A cambio que se dedique a cosas donde pueda realmente ser competitivo. Esa es la esencia de la doctrina del libre comercio y del libre intercambio.
Creo que no va a ser tan fácil, sino que se van a desatar ahora políticas para llevar al Gobierno a dar un apoyo mayor a la producción de maíz que se había dejado.
Un tiempo se dejó, luego otro tiempo se apoyó, hubo unos precios del maíz que hicieron que tierras dedicadas a otra cosa en las zonas de riego se pusieran al maíz, y ahora hay que volverlo a pensar.
Los japoneses decidieron que el arroz lo van a seguir produciendo cueste lo que les cueste, y que no es un problema de Adam Smith, sino es algo mucho más complicado. Nosotros también tendremos que ponernos a discutir eso, además de las partes políticas y económicas.
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Ese sustrato fundamental de lo que somos, como dijera el Popol Vuh.
LORENZO MEYER COSSIO: Exactamente, pero lo que somos con unas estructuras económicas…
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: ¿No se puede medir por oferta y demanda, no?
LORENZO MEYER COSSIO: …en donde está MASECA, en donde están unas estructuras ya muy fuertes, muy monopolizadoras, que ya no es el mexicano produciendo maíz en una multitud de productores, sino son las grandes concentradoras. Eso todavía no lo hemos tocado, ¿qué significa eso? Pero bueno…
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Creo que lo tocaremos en el próximo, en otro programa.
LORENZO MEYER COSSIO: Lo tocaremos en otra ocasión.
SERGIO AGUAYO QUEZADA: Bien, continuamos con un tema que nos atañe a todos. ¿Por qué?
En México siguen violándose de manera sistemática los derechos humanos. Hemos avanzado porque ya sabemos que se violan, es decir la información fluye, hay misiones internacionales; lo que no ha cambiado -y eso sí es muy preocupante- es la indolencia de las autoridades que se las arreglan para dejar que sigan violándose de manera sistemática esos derechos.
Me voy a referir rápidamente a dos casos. El día de ayer en la revista “Proceso”, Carlos Monsiváis, Jenaro Villamil y Carlos Bonfil sacan un desplegado en el cual denuncian el asesinato de un homosexual en Tamaulipas, al cual las autoridades en el momento de llegar el ministerio público por supuesto, inmediatamente califican “es un crimen pasional”, cuando quienes firman el desplegado, una página completa, dicen también puede ser un crimen de odio.
Y es inaceptable que la autoridad en el momento que ve a alguien sexualmente diverso, inmediatamente busca formas para evadir su responsabilidad de investigación de crímenes de este tipo; crímenes de odio que por cierto son un patrón sistemático constante en México.
El segundo caso es el de un joven que vive en la ciudad de México, Joaquín Alba, parapléjico, que lo corrieron de un club, el Club Sport World que le informó que no querían que estuviera ahí porque primero no tenían instalaciones y segundo no querían que los otros clientes que iban al club lo vieran.
Y él decidió enfrentarse presentando denuncias, lo cual le parece extraordinario porque no sólo las autoridades violan los derechos humanos, sino que también empresas privadas con la complacencia de las autoridades, porque en este caso tanto el Gobierno del Distrito Federal, la delegación, no cumplió con su tarea de asegurarse que el reglamento existente se aplicara para que instalaciones públicas tengan accesos, posibilidades de ingresar a las instalaciones.
Como autoridades federales que, bueno está muy bien, tenemos una comisión nacional para prevenir la discriminación, que lanza campañas muy interesantes pero que tiene que actuar con mayor energía para combatir estos actos de discriminación contra un sector de la población, que en lugar de salir a combatir -como el caso de Joaquín Alba- prefiere quedarse en su casa y no exponerse a ciudades como la de México, en la cual las banquetas son otra entelequia, otro buen deseo de nuestros gobernantes.
Somos una ciudad con pocas banquetas y las que existen muy deterioradas para quienes no pueden desplazarse como la mayoría lo hacemos.
LORENZO MEYER COSSIO: Yo quiero citar a Monsivais otra vez. Tú lo tomas en el desplegado de “Proceso”; quiero citar a Monsivais en otra cosa en donde él lanza un reto a la sociedad en su conjunto, se muestra particularmente sorprendido porque no ha habido una protesta por las formas como las autoridades del sexenio anterior y del nuevo, que coinciden en esos días, decidieron acabar con el movimiento de protesta en Oaxaca.
Lo que se ha sabido, no es por falta de información, cualquiera que quiera informarse tiene la información a la mano, ha habido una serie de violaciones a los derechos humanos. El caso de Joaquín Alba es discriminación en primer lugar, aquí sí es la autoridad.
Hay una comisión internacional observadora de los derechos humanos que presenta un reporte y que va a seguir su cauce a ver si el ámbito internacional hace el caso que nosotros, que estamos en primer lugar obligados a responder a esto, no hemos hecho.
Pero el informe que está muy bien resumido en un artículo que Adolfo Gilly saca hoy en “La Jornada”, si pueden, tienen oportunidad veánlo, está ahí el resumen, tiene todos los horrores propios del antiguo régimen pero hechos en el nuevo: asesinatos, violaciones, amenazas, desapariciones, todo lo que se suponía que correspondía a otra forma de hacer política, no a la democracia.
Y sin embargo está presente aquí y no hay, como en el caso de Chiapas, cuando sale a la luz pública la rebelión y las condiciones en que se encuentran los indígenas en Chiapas, hay una muestra de simpatía de las otras partes de la sociedad mexicana, que en esta ocasión no.
Si a Flavio Sosa lo mandaron a un penal de alta seguridad, pues ahí que se quede, total, a ver si ahí le cortan el cabello, lo hacen aparecer de una manera más decente. Justamente como hacían en el ’68, ¿se acuerdan de las fotografías del ejército, cortándole el cabello a los estudiantes que habían capturado?
Entonces el obispo Vera está también metido en esta denuncia de lo que está pasando en Oaxaca, que no tiene eco en la sociedad mexicana. Habrá que preguntarnos por qué, debe de haber una explicación, pero ya el tiempo se nos corre y mis colegas siguen.
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Yo creo que hay explicaciones diversas. Una muy obvia es que no hay los recursos suficientes para montar toda la infraestructura que se requiere para proteger algunos derechos humanos, y también para evitar una discriminación que se da en el mundo material o de la falta de equipamiento urbano institucional para poder atender las necesidades que tienen gentes con alguna discapacidad. Pero esta es una primera.
La otra es que todavía no tenemos un régimen pleno de defensa de los derechos humanos que se establezca desde la Constitución, haciendo una serie de modificaciones que están planteadas; están planteadas por varios partidos, están planteadas por el Presidente, pero no han sido aprobadas por el Congreso y por el Constituyente Permanente porque se requieren hacer ocho o nueve cambios constitucionales para poder lograr un régimen más amplio de protección a los derechos humanos y de defensa contra la discriminación.
Y finalmente porque no tenemos autoridades capaces de hacer cumplir las pocas normas que ya existen, como éstas que se citaban en el caso del club privado que ha hecho unas instalaciones que no respetan los reglamentos y que está mostrando que hay una incapacidad, una corrupción, una incompetencia en algunas autoridades de distintos gobiernos, por cierto de distintos partidos; no estamos hablando aquí de una situación que se pueda achacar a un partido, es una deficiencia generalizada de la clase política y de la clase más bien administrativa que no está teniendo capacidad para poder aplicar la ley en defensa de los derechos humanos.
LORENZO MEYER COSSIO: Aunque en Oaxaca sí es más claro.
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Es mucho más claro.
JOSE ANTONIO CRESPO MENDOZA: Ahora, en esa cuestión de la discriminación sí ha habido avances, en el gobierno pasado hubo avances importantes en materia legislativa; se incorporó en el Artículo Primero Constitucional precisamente la prohibición de discriminar por cualquier motivo: preferencia sexual, raza, género, condición social, etcétera.
Y también nuevas leyes por ahí, en otro nivel, leyes secundarias, en contra de la discriminación.
Por ejemplo, en el Distrito Federal, en el Código Penal, está penada la discriminación. Hasta donde sé no se ha aplicado en ningún caso porque no ha habido ninguna denuncia. Ahora el caso de Joaquín Alba podría implicar una denuncia en ese sentido y veremos cómo opera el aparato de justicia y la aplicación de la ley, desde luego de acuerdo al procedimiento de la ley.
Pero son leyes nuevas que no han sido puestas a prueba y veremos en ese sentido qué tanto funcionan. Sabemos que en México hay una brecha importante entre la ley y la realidad. De lo que se trata en la democracia, en la medida en que haya una intención democrática de los gobiernos estatales y el federal, es de cerrar esa brecha entre legalidad y realidad, de tal manera que coincidan dentro de lo posible por supuesto.
Para terminar, simplemente el caso de la homofobia algo que ustedes tocaron la semana pasada pero yo quiero volver a mencionar, este asunto del Secretario de Salud cuando dice “los anuncios que hubo en el sexenio pasado -también hay que reconocerlo, en el gobierno de Fox- en contra de la homofobia, están propiciando la homosexualidad, están predicando casi la homosexualidad.
Bueno, ahí me parece que hay una incomprensión y una ignorancia total del problema real, tanto de la homosexualidad como de la homofobia que yo creo que este gobierno, si quiere tener la bandera democrática, no puede permitir.
SERGIO AGUAYO QUEZADA: Pues sí habría mucho más que decir, pero me parece que ya se nos acabó el tiempo. Regresamos en un momento.
JOSE ANTONIO CRESPO MENDOZA: Bueno, sabemos desde el año 2000, en que se registró la primera alternancia pacífica de este país, que los partidos políticos están en una situación de reacomodo, de reajuste e incluso de crisis de identidad.
Los que están en el poder no se acaban de acostumbrar de que son partido de gobierno, ya lo están empezando a hacer, pero pasaron varios años para ello; los que están en la oposición, en particular el PRI, tampoco se acaban de acostumbrar de estar en la oposición después de 70 años, es comprensible.
Y el PRD también después de la derrota del año pasado, está en una situación de búsqueda de liderazgo, eso es algo pendiente que está en el PRD y que puede generarle varios problemas; quedó una especie de vacío, López Obrador desde luego está ahí, pero no todos los perredistas siguen su estrategia. Tendrá que surgir un nuevo liderazgo o reafirmarlo en su caso López Obrador ese liderazgo entre todos los sectores del PRD.
En el PRI viene la contienda por la dirigencia nacional, que podría ser positiva si la sacan bien, para por lo menos estabilizar ésta falta de presidente que tienen desde el año 2000 o reproducir un problema grave como lo fue en el 2002, cuando se renovó la dirigencia por primera vez sin Presidente de la República.
Y en el PAN también hay problemas. En el PAN tenemos ahí una confrontación que ya la hemos tocado varias veces aquí, entre Manuel Espino, el presidente del PAN y Felipe Calderón. Espino, pareciera que en una posición muy desafiante, incorpora gente del gabinete de Vicente Fox y también está sufriendo otro tipo de problemas que antes no tenía el PAN, como es el caso de Yucatán.
Hasta hace muy poco decíamos: las elecciones del PRI son fraudulentas generalmente, las internas del PRI por diferentes cosas; las del PRD son una desorganización impresionante como pauta normal y en el PAN las cosas salen normalmente bien, son básicamente democráticas, son institucionales, son disciplinadas.
Bueno, esa tradición del PAN de elecciones internas civilizadas, institucionales ha roto en Yucatán no solamente porque hubo una impugnación, que ya las había habido antes, de quien pierde -en este caso Ana Rosa Payán-, sino que ahora rompe con el partido a ese nivel.
Había habido rupturas, había habido crisis en el PAN pero en este nivel, en estas nuevas condiciones me parece que es algo novedoso, que podría poner en riesgo lo que se daba como un hecho que es la ratificación, el refrendo del gobierno de Yucatán en manos del PAN.
SERGIO AGUAYO QUEZADA: Mira, creo que pese a todas estas crisis estos partidos tienen algo en común, hay una matriz que explicaría en parte las crisis que todos ellos sufren y tiene que ver con el exceso de dinero que perciben.
No se ha analizado lo suficiente, lo sostengo como hipótesis, el impacto que ha tenido el crecimiento desproporcionado de los recursos públicos en los partidos. Vamos, son ríos de dinero que ha llevado a un debilitamiento del compromiso del militante con el partido, porque se han venido cayendo las cuotas que los militantes dan porque los partidos ya no las necesitan.
Es tanto el dinero que reciben, que eso provoca por tanto debilitamiento de la militancia y acostumbramiento a que la victoria, la militancia política requiere de recursos, de mucho dinero. Y por tanto creo que uno de los rasgos que uno encuentra constantes en esta descomposición al interior de los partidos, no siempre pero con mucha frecuencia, tiene que ver con el uso de los recursos.
Yucatán, ¿qué pasa, cuál es la denuncia de Ana Rosa Payán? El uso de los recursos del Estado para obtener una victoria, lo cual llama la atención porque son 12 mil los electores en el PAN yucateco que fueron a las urnas fueron 10 mil 500, 11 mil, es decir muy poca gente y sin embargo requieren de inyecciones de dinero que no se comprendían en el pasado.
Podría seguir enumerando pero no hay el tiempo. Simplemente lo lanzo como una idea central: los partidos, pese a todas sus crisis, en diciembre estuvieron de acuerdo en no reducirse los presupuestos que reciben del erario público, más allá de declaraciones de Alternativa que no pasó de declaraciones, todos los partidos siguen recibiendo ahora, en el 2007, siguen recibiendo una cantidad enorme de dinero público.
LORENZO MEYER COSSIO: A pesar de que saben muy bien que el grueso de la opinión pública está en contra de eso. Quiere decir que estamos en un ejemplo más de la crisis de representatividad; los partidos se supone que representan a los diferentes sectores de la sociedad, pero en este punto la sociedad está absolutamente de acuerdo en reducirles los dineros y ellos dicen “no estamos de acuerdo con la sociedad”.
Pero no hemos puesto la vista, el reflector en los partidos pequeñitos. Esos parecían ahora ya no tener crisis; ellos ya pasaron por sus crisis. El Partido Verde ya se hizo apéndice del PRI; el PT y Convergencia están muy en la línea del PRD.
Me llama la atención el PANAL, porque en un reporte que han sacado últimamente…
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Ayer.
LORENZO MEYER COSSIO: En estos días salió. Es realmente una agrupación hecha para que Elba Esther Gordillo maneje su estrategia electoral, con quien decida aliarse; ese partido es una máquina. No representa a ningún sector de la sociedad, representa a Elba Esther con los recursos del sindicato y tienen una…
SERGIO AGUAYO QUEZADA: Con los recursos públicos.
LORENZO MEYER COSSIO: Públicos, pero como los sindicatos no tienen que dar cuenta, esa es una de las cosas absurdas que no tienen que dar cuenta de esos recursos lo líderes sindicales y entonces ahí están los dineros para computadoras, para seguir a paso a paso; los dineros para los que tienen en cada elección que ir a calificar y poner al día a quienes van a ser los operadores, capacitar, a quienes van a ir de observadores en las urnas, a quienes van a estar como parte de las mesas electorales.
Es una maquinaria aceitada con dinero del sindicato al servicio de el liderazgo del sindicato, ese no es un partido, ese no tiene ningún problema interno ahora, está básicamente bien. Esa es la otra cara de las crisis de los tres partidos, los chiquitos.
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Yo creo que estamos ante la presencia de una recomposición completa del sistema de partidos, se está gestando un nuevo sistema de partidos, probablemente no de partidos, sino de formaciones partidarias.
Creo que hay dos polos que están muy claramente creciendo, que son un polo que podemos llamar de derecha si quieren y otro de izquierda. Yo prefiero verlos como un polo liberal conservador y un polo liberal social, que son los que están creciendo y el grupo que aglutinaba el PRI está reduciéndose y quedándose en un segundo plano, no como uno de los tres grandes, sino dejando dos grandes. Esto es lo que se perfila, a mi juicio, en el horizonte.
El PRI no está para ser descartado desde luego, no estoy insinuando eso, tiene dos grupos parlamentarios en las cámaras federales, tiene grupos parlamentarios en todo el país, tiene 17 gubernaturas, muchos alcaldes, etcétera. Pero está empezando a declinar de una manera muy fuerte.
Ahora que viene este asunto que se toca de Yucatán, a mí me gustaría tocar también el asunto de la identidad. Está habiendo un problema serio en Yucatán a propósito de quien propone a Ana Rosa como candidata independiente; ha habido una propuesta que está haciendo el PRD con sus aliados naturales que están ya en un frente agrupados, que vienen de la Coalición por el Bien de Todos, pero este sería un contraste terrible.
Ana Rosa Payán siempre ha representado otra posición ideológica. Entonces llevarla a su candidatura sería un pragmatismo verdaderamente desmesurado. No hay que olvidar que Ana Rosa Payán propuso al Consejo Nacional del PAN la candidatura de Manuel Espino, que no está precisamente clasificado como de izquierda.
De tal manera que ahora Ana Rosa aceptando una candidatura o promoviendo una candidatura por el PRD, PT y Convergencia es un asunto que se está planteando como una crisis.
Por otro lado, parece que también está haciendo negociaciones con el Partido Verde Ecologista de México, lo cual implicaría que el Verde rompiera con el PRI, que ya tiene candidata, que es Ivonne Ortega, y lanzara la candidatura de Ana Rosa Payán para crecer el Verde como tal.
Porque yo tengo la percepción de que Ana Rosa puede hacer una lucha importante, apoyada incluso por cuatro o hasta cinco partidos de los pequeños como se dice, pero que están perdiendo toda idea programática, toda idea ideológica, doctrinaria porque ya nada más está luchándose por el poder.
LORENZO MEYER COSSIO: El PRD, declaró su líder, que es imposible lo de Ana Rosa, porque ella pide que no vaya Andrés Manuel a su campaña y entonces creo que afortunadamente llegamos a un límite para los dos: ni Ana Rosa va a ser tan pragmática de aceptar al PRD, ni el PRD tan pragmático de aceptar a Ana Rosa Payán.
FRANCISCO JOSE PAOLI BOLIO: Ojalá. Pero ese es un tema de identidad que se esta refiriendo en todos los partidos.
JOSE ANTONIO CRESPO MENDOZA: Bueno, pero ya nos acabó el tiempo. Nos vemos la siguiente semana.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante. A mi tambienEstoy de acuerdo en que es muy sospechoso que el gobierno le avisa a los narcos lugar y dia de los operativos, eso es muy sospechoso.

Nadie dijo...

Pinche Erat,

¿Porqué rockeas tanto cabrón?

No merezco ser nombrada colaboradora.

EXCELENTE trabajo poner este programa. Mis más profundos respetos.

Nadie dijo...

Por cierto...

Pusieron unos güachos en San Pedro-Garza García para que los pinches panáticos dejaran de berrear.

Obviamente Nati no quería hacer alaracas pendejas como en Tijuas y Michoacán que nada más chingan a la gente sin resolver nada, pero como los panáticos se la pasan chingando, pusieron UN puesto de control militar a la entrada de San Pedro...

Para que se sientan seguros!!!

PENDEJOS

Anónimo dijo...

¡Saludos, mi Tonch!

Ron A. W. dijo...

Guachos

Esa es de primer nivel Toncha!

Erat, excelente post. No sería ninguna sorpresa que el gobierno negociara con los narcos, pero si a Fecal lo atan de manos el CCE y su cuñado, por ejemplo, los narcos se van a subir a la silla!

Como dice Gutiérrez Vivó, "a veces es tanta la pequeñez"

Y que conste que no es alusión a su metro y medio de altura.

marichuy dijo...

Erat
Antes cada lunes veía "En primer plano", pero últimamente la política me tiene depre y enfurecida, entonces ya casi no lo veo, menos cuando sale una nefasta panática -como diría Tonchis-, llamada Ma. Amparo Cazar, mamona (perdón por el francés), tendenciosa y derechista como ella sola. En general todos los comentaristas son muy atinados y aunque en análisis político es difícil hablar de objetividad, creo que Sergio Aguayo es muy sensato, José Antonio Crespo también es tranquilo y prudente, Lorenzo Meyer –que me encanta- es más apasionado y Paoli, para ser panista es soportable, sin ser mi adoración.

Del ataque frontal al narco, ya Fecalin aclaró que su "cruzada nacional contra el crimen organizado" es para quedar bien con los extranjeros, bueno para atraer inversiones extranjeras, o sea no es para beneficio de los mexicanos; más un golpe mediático que una solución de fondo. Las extradiciones, pues para obedecer a su papi el Halcón Mayor (baby Bush), o sea…

Erat, que paciencia la tuya de estar copiando esto, aunque espero que lo hayas bajado de la página de Canal 11, porque si no esta grueso.

Por lo que respecta al término de guachos, me encantó, hasta ahora solo se lo había escuchado a mi papá que vive en Acapulco y en Guerrero en general, se le da una connotación totalmente peyorativa.

Saludos

Nadie dijo...

He de decir que "guacho", en mi rancho, no es peyorativo sino que se refiere simplemente al soldado razo, en corto.

También he de decir que a mi los militares de México no me caen nada mal. Me parece la última institución nacional con dignidad y hace bien en dejarse comandar por quien el congreso le diga.

Ni modo. No soy antimilitar, lo que soy es antifecal y me parece vergonzoso que un imbécil de esa infinitesimalidad ética pueda llamarse Comandante en Jefe.

Razón de más para admirar la disciplina militar.

Anónimo dijo...

http://www.eluniversal.com.mx/notas/402863.html

Sorprenden a agentes de Operativo Tijuana recibiendo soborno

Gracias a una cámara, 11 elementos fueron sorprendidos al aceptar mordida para no revisar el vehículo interceptado en un retén instalado en el centro de esta ciudad

Julieta Martínez/ corresponsal
El Universal
Tijuana, BC
Viernes 26 de enero de 2007
14:07 Once agentes federales, estatales y municipales que participan en el Operativo Tijuana fueron sorprendidos al aceptar un soborno para no revisar el vehículo de un par de individuos interceptados en un filtro de revisión instalado en el centro de esta ciudad.

El secretario de Seguridad Pública Municipal, Luis Javier Algorri Franco, denunció que los oficiales fueron captados cuando recibían dinero, por una cámara de vigilancia colocada en la esquina de las calles Coahuila y Miguel F. Martínez, cuyo material entregó a la Procuraduría General de la República (PGR) para que actúe en consecuencia.

Son cuatro elementos de la municipal, seis de la Federal Preventiva y uno de la Estatal Preventiva, a quienes se les observa dialogando con dos hombres que viajaban en una camioneta blanca Expedition en el crucero mencionado, y que a su vez entregaron varios billetes de diferentes denominaciones.

Algorri Franco detalló que, según el video, los agentes recibieron el dinero -se alcanza a distinguir un billete de 100 dólares y uno de 200 pesos- y momentos después voltean la espalda a la cámara, aparentemente para repartirse el dinero.

Los hechos ocurrieron al filo de las 02:00 horas del día 17 de este mes, y los policías aparentemente recibieron el soborno para no revisar la camioneta que llegó al filtro que habían colocado en el centro de la ciudad.

Hasta el momento no se ha dado a conocer la identidad de los responsables del soborno, quienes también son parte de este hecho delictivo, y tampoco de los policías, aunque ya fueron turnados a la sindicatura municipal, en el caso de los oficiales de esta corporación, explicó el secretario de Seguridad.

Sin embargo, en el video se alcanza a distinguir el número de la patrulla de la PFP con el 08946 y la de la PEP con el 254, aunque la municipal no alcanza a observarse por la oscuridad.

Sobre estos hechos, el secretario de Seguridad Pública estatal, Víctor de la Garza Herrada, admitió que un elemento de la Policía Estatal Preventiva fue consignado ante el Ministerio Público por participar en este hecho que se confirmó fue una extorsión.

No reveló la identidad del oficial, pero explicó que son seis agentes de la Federal Preventiva los involucrados y contra quienes se sigue una querella penal.

Héctor Sánchez Gutiérrez, coordinador del Operativo Tijuana, tiene conocimiento de los hechos y a su vez confirmó que los hechos se registraron a raíz de una falta de tránsito que cometieron los tripulantes de la Expedition.

Cabe mencionar que el secretario de Seguridad Pública Estatal aseguró que los policías recibieron un billete de 10 dólares y otro de 200 pesos a pesar de que el video captó que se trataba de al menos 100 dólares y moneda de otras denominaciones.

JMG dijo...

puto FECAL

Anónimo dijo...

totalmente mal el fecal empieza mal y lo que mal empieza mal acaba