miércoles, diciembre 20, 2006

Me queda claro: Sergio Sarmiento contra la educación

Me queda claro que Sergio Sarmiento, quien fungiera como director editorial para América Latina de la Enciclopedia Británica, no tiene la menor idea de cuál debe ser el debate en torno a la captación y distribución de los ingresos por parte de la educación pública superior mexicana. Afortunadamente, sus tonterías no quedaron sin respuesta.

Educación y dinero
Sergio Sarmiento

AM
13 de diciembre de 2006
Originalmente publicado por Reforma el 13 de diciembre de 2006
Los rectores de las universidades están exigiendo que se les dé más dinero en 2007 de lo que la Secretaría de Hacienda ha presupuestado. ¿Lo conseguirán? Es muy probable. Nadie duda de su influencia política y en especial de la del rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente. ¿Pero es eso lo que más le conviene a nuestro país o a nuestro sistema educativo? Me parece que no.
La Secretaría de Hacienda está presupuestando 142,400 millones de pesos para la educación en 2007. La cifra es igual, una vez descontada la inflación, que la que se propuso originalmente para este 2006. Se están programando recortes para las universidades, pero el ahorro se está reencauzando a otras partes del gasto educativo.
A la U
niversidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Hacienda le está asignando 16,715 millones de pesos para 2007. Esto representa una disminución de 334 millones de pesos, ó 1.9 por ciento, sobre los 17,049 millones de pesos que ha recibido del presupuesto federal de 2006.
Pero no nos creamos la historia de que la UNAM recibe un trato de paria por parte del Gobierno federal. El dinero que obtiene representa el 11.7 por ciento de todo el gasto federal en educación, lo cual no es malo para una institución que cuenta apenas con el 1 por ciento de los estudiantes del sistema escolarizado nacional.
En su campaña anual por obtener más fondos para la UNAM, el rector De la Fuente obtuvo una ayuda inesperada del diputado Raúl Alejandro Padilla, presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, quien cometió una pifia política al cuestionar sin fundamento la calidad de la instrucción de la universidad. Los otros rectores de las universidades públicas se han unido a la cargada, porque han aprendido en años anteriores que en el perverso mundo de la política mexicana, el que más chilla es el que más dinero recibe.
Son muchos los mitos que se utilizan en esta batalla por el dinero de los contribuyentes. Se ha dicho, por ejemplo, que los gobiernos de los últimos años han castigado los presupuestos de la educación, especialmente la de nivel superior. Pero el informe “Education at a Glance 2006” de la OCDE señala que entre 1995 y 2003 el gasto total de México en educación primaria y media aumentó 49 por ciento, el sexto incremento en importancia entre los países miembro de esa organización, mientras que el de instrucción superior subió 67 por ciento. La educación universitaria, como vemos, ha sacado mayor tajada de un presupuesto en aumento.
El gasto educativo total en México es bajo si nos comparamos con los países ricos, pero resulta alto en términos del Producto Interno Bruto. En promedio los países de la OCDE gastan 5.9 por ciento del PIB en educación mientras que nosotros dedicamos el 6.8 por ciento. El contraste es mayor si consideramos el gasto educativo contra el presupuesto gubernamental en lugar del PIB. Las naciones ricas usan el 13 por ciento de su gasto público en educación; nosotros empleamos el 22 por ciento. Nuestro problema no es de dinero sino de distribución de recursos y de eficacia de gasto.
Es indudable que México dedica un porcentaje demasiado alto del gasto educativo para las universidades. En otros países la educación primaria y la media son gratuitas, pero los estudiantes o sus familias pagan cuando menos una parte de la instrucción universitaria. Esto permite dedicar una mayor cantidad de recursos a la instrucción básica y media.
En México la instrucción primaria y la media siempre salen perdiendo en ese juego político anual en el que se decide el reparto del dinero público. Si un grupo de directores de secundaria se dirige al Palacio Legislativo para, respetuosamente, pedir más dinero a los diputados para sus escuelas, ni siquiera se les permitirá franquear la puerta. En cambio, los rectores de las universidades son enormemente influyentes y obtienen con facilidad los recursos que exigen.
El reto educativo fundamental de nuestro país está en mejorar la calidad de la instrucción primaria y secundaria y en ampliar la cobertura de las preparatorias. El seguir privilegiando a las universidades no nos ayudará gran cosa. De hecho, el desempleo para graduados de instituciones de educación superior es ya más alto que para quienes sólo tienen instrucción secundaria o media. En esto el propio mercado laboral nos está mandando un mensaje: ya tenemos un número suficiente de graduados universitarios.
No le regateo sus méritos a la UNAM o a las demás universidades públicas. El problema es que la prioridad del país es otra. Pero los rectores, siempre en busca de dinero, no se detienen a pensar en ello.
OFERTA DE EBRARD
El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, ha ofrecido una solución cuando menos al problema de dinero de la UNAM. Ha dicho que a través de proyectos de servicios podría inyectarle cuatro mil millones de pesos a la institución. Esto le permitiría a la UNAM aumentar sus recursos propios sin tener que cobrar cuotas. La idea parece positiva, sobre todo si esos servicios son reales y no un simple subsidio disfrazado. Pero aun cuando fuera un subsidio, es más lógico que lo proporcione el Gobierno de la ciudad de México en lugar del federal. Después de todo, gracias en buena medida a la política de pase automático de sus propias preparatorias, ubicadas todas en el Distrito Federal, la enorme mayoría de los estudiantes de la UNAM son capitalinos.
sergiosarmiento@todito.com



Sarmiento y la oscuridad
José Blanco
La Jornada
19 de diciembre de 2006

Sergio Sarmiento le echa encima a la realidad de la educación superior mexicana (ES) unos cuantos datos con los que crea un frankestein sin relación con lo concreto de este nivel educativo.
En "Educación y dinero" (Reforma 13/12/06) ha vuelto a crear un monstruito con unos cuantos datitos. Por la lectura de sus artículos sobre ES, por alguna entrevista televisiva que alguna vez me hiciera sobre el tema, me queda claro (como dice Sarmiento en todos sus artículos), que sobre el asunto lo ignora todo. Parlotear con ligereza es producto de su íntegro desconocimiento de la historia de este nivel educativo. Las formas mismas de decir al escribir sobre la ES desvelan muy claramente cuán lejos está del tema.
"Los rectores de las universidades se unieron para exigir más dinero..." Los rectores no se unieron para exigir dinero. Los rectores y directores de 145 instituciones (IES) públicas y privadas están permanentemente unidos, asociados, en la ANUIES, con un programa de trabajo anual. La ANUIES, y más precisamente, su Consejo Nacional (el órgano permanente de dirección de la asociación), mantiene coordinación con la SEP, y con las Comisiones de Educación y de Ciencia y Tecnología, de la Cámara de Diputados (a veces también con SHCP), para la formulación del presupuesto anual de las instituciones públicas (las privadas socios de ANUIES no tienen vela en este entierro aunque se mantienen igualmente informadas).
Sergio Sarmiento maneja sus datitos de una forma harto negligente e incompetente. Es inútil compararnos con los países de la OCDE en gasto educativo en términos del PIB. Estime Sarmiento lo que ocurre cuando el indicador que se utiliza es el PIB por habitante: nuestro gasto resulta muy inferior al de los países asociados a la OCDE. O medir el gasto educativo, como lo hace Sarmiento, como proporción del gasto público, es una trampilla para niños: México tiene un gobierno pobre, con un ingreso fiscal equivalente a una cuarta parte del de los otros países de la OCDE. El gasto educativo que realizamos, por supuesto, no puede aparecerle a Sarmiento sino como muy elevado, precisamente porque es una rebanada importante de un pequeño pastelito.
Sarmiento sabe hacer otras trampas, o bien ignora cómo se usan los indicadores. Efectivamente, como dice nuestro personaje, entre 1995 y 2003 el gasto en educación superior creció 67 por ciento frente a 49 por ciento destinado a los niveles precedentes (todos los niveles y no, como él dice, primaria y secundaria). Lo que no dice es que el número de estudiantes en ES aumentó 48 por ciento y en los niveles anteriores sólo 13 por ciento en ese lapso. La consecuencia fue que el gasto por estudiante en ES se incrementó solamente 13 por ciento mientras que en los niveles anteriores lo hizo en 32, casi 2.5 veces más. La conclusión, como es evidente, es exactamente la contraria a la que arribó el agudo análisis de Sarmiento, por no tener presente la dinámica demográfica.
Lo anterior, sin considerar que aquí y en China, el costo por estudiante de ES equivale varias veces al costo por estudiante de los niveles básicos. Anote el señor Sarmiento, además, que desde el inicio de los años ochenta, la ES es cada vez más intensiva en capital. ¿Tiene él alguna idea, aunque fuere remota, de lo que cuesta la investigación en la UNAM usando un acelerador de partículas, una supercomputadora Alpha Server SC-45 o el complejo telescópico de San Pedro Mártir, por poner unos cuantos ejemplos entre cientos de ellos? ¿Se puede imaginar entonces que ello conlleva un aumento del gasto, no obstante lo cual la mayoría de las universidades públicas siguen siendo pobres?
¿Sabe Sarmiento que en dólares ajustados por la paridad del poder de compra, a México le cuesta 19 mil 747 dólares cada egresado, mientras que la media de la OCDE es de 43 mil 30 dólares, que a Suiza le cuestan 93 mil 869 dólares cada egresado, o 75 mil 221 a Suecia, de acuerdo con exactamente la misma fuente que él usó para sacar sus datitos (Education at a Glance 2006)? Su idea de que la ES en México cuesta mucho está totalmente fuera de lugar. Lo cual no significa que haya mucho por hacer en materia de eficiencia de gasto en las IES mexicanas.
Por supuesto, Sarmiento desconoce que la población 20-24 años creció a una tasa media anual de 3.9 por ciento entre 1970 y 2005, mientras que la población escolar de ES lo hizo a un ritmo de 6.3, pasando la cobertura de 9.5 a 20.8 por ciento en el mismo lapso: esto no habría podido ocurrir si el gasto en ES no hubiera crecido concomitantemente. Con todo, la nuestra sigue siendo una cobertura sumamente baja. Por su parte la población adulta (25-64 años) con ES es de 16 por ciento en México (con bachillerato sólo ¡7 por ciento!), mientras la media de la OCDE es de 25 por ciento, España, 26; Japón, 37; Canadá, 44. En otros términos, es obvio que requerimos educar mucha más gente, y que su apreciación sobre las posibilidades de absorción por el mercado está perfectamente errada (ocasión habrá para aclararle este punto).

12 comentarios:

Anónimo dijo...

No gana uno para verguenzas con los intelectuales organicos al servicio del poder.

Ron A. W. dijo...

La UNAM alberga al 1% de los estudiantes del sistema escolarizado?

Mas bien hay que ver que porcentaje del sistema escolarizado GRATUITO es!!

Pinche Sergio Sirviento siempre con sus mamadas.

Soy Ron, por sí me vuelve a poner anónimo esta madre.

Nadie dijo...

Sergio Sarmiento tiene aproximadamente la misma simpatía que un adoquín de banqueta o un policía de la bancaria. El tipo es un mueble.

Su tono es tan gris, tan monocromático y tan insulso que es muy difícil (un exitoso ejercicio de budismo zen), pasar del segundo párrafo de sus columnas.

En conflagración contra las neuronas del mexicano, algunos medios incluso le dan espacio a este güey para tener un noticiero readiofónico y tenía también uno de entrevistas donde se dedicaba a hacer competir a sus invitados contra sus televidentes: a ver quien se duerme primero.

Salve, Sarmiento. (A que es una owneada navideña de primera)

Anónimo dijo...

¿Necesita México Aceleradores de partículas? ¿Para..?

¿Necesita México Investigación en ciencia básica? ¿Para---?

Concer por conocer...En un país con 40 millones de pobres...

Investigar en problemas que nada resuleven...Emplear dinero público para esto.

Será que para satisfacer un ego complaciente y voraz.

Científicos que son burócratas y su profesión es realmente canilderar por más lana para sus puñetas mentales.

Gerardo de Jesús Monroy dijo...

Amigo anónimo, todos necesitamos de la investigación básica. Nuestra curiosidad humana innata debería ser motivo suficiente para que un Estado se preocupara por fomentarla. Hay, además, otra razón para no menospreciarla, y es que las investigaciones básicas tarde o temprano dan lugar a aplicaciones prácticas de importancia económica.

Nadie dijo...

Esa mentalidad es la que nos va a sumir más en el pinche hoyo de la mediocridad.

¿Cienci Para Qué? ... Imbécil!

De donde crees que salen los billones (billones en español mexicano) dde dólares de los países de primer mundo?

De desarrollar ciencia. La ciencia enjendra conjuntos enteros de tecnología. Pero pedirle a un panazi que entienda un poquito de eso es solicitar neuronas para los árboles.

Mira: la teoría computacional es desarrollada por el equipo de Von NEumman, compuesto primordialmente por Alan Turing, un Alemán y otro par de gringos.

Lo que hicieron estos científicos precipitó la industria informática y, con ella, la era de la información y, con ella, miles de millones de dólares para las economías gringas, alemana e inglesa (la gringa se ebenfició más porque ganó la guerrra y porque los panazis ingleses orillaron a Turing al suicidio por ejercer su homosexualidad).

¿Ya le entendiste? Pinche mentalidad mediocre caray.

Aleks dijo...

Muy buen debate... y como usualmente, Sarmiento sale muy mal parado.

Virgilio Avila dijo...

La tasa de universitarios supero a los que no tienes instruccion educativa.. y que quiere este pedazo de "boñiga" con patas?? que no vayan a la escuela?.

Estoy de acuerdo en la investigacion basica... pero "carajo" ponerla en practica , NO MAMAR.

Antonio dijo...

¡Híjoles! Llego tarde a esta discusión. Le hubiera contestado al anónimo que pregunta para qué sirve la investigación básica lo que Faraday le respondió a la reyna de Inglaterra cuando ésta le preguntó para qué servían todos sus experimentos:

--Respóndame usted majestad ¿Para qué sirve un bebé recién nacido?

Las investigaciones de Faraday en su momento no reportaban casi ninguna utilidad práctica, pero hoy hacen posible la telefonía calular, las telecomunicaciones, los hornos de microondas y una buena parte de la tecnología informática, además de sirvieron de base para las ecuaciones de Maxwell que sembraron la inestabilidad en la confianza en la física clásica dando lugar al replanteamiento de conceptos que condujo a la teoría de la relatividad y a la mecánica cuántica.

Un Abrazo

Anónimo dijo...

Apreciable toncha: Imposible no coincidir contigo en que el señor Sarmiento dista mucho de ser un dechado de carisma, pero, ¿qué tiene que ver éso? ¿qué adelantamos con argumentar "ad hominem"?
Apreciable bruja berti: Sarmiento fue muy explicativo al decir que el mercado laboral está mandando un clarísimo mensaje: el desempleo de profesionistas cunde, por la simple y sencilla y poderosa razón de que ya hay muchísimos más profesionistas (en prácticamente todas las áreas) de los que realmente se necesitan. Ésto, tristemente, hace que la frase "Universidad-patito" se vuelva un pleonasmo: todas las universidades son patito(y cuando digo todas, quiero decir todas, absolutamente todas: la UAM, la Ibero, la UNAM, el IPN, el ITESM, en fin, todas), porque, simplemente, todas se han convertido en fábricas de desempleados (el arquitecto-trailero, el abogado-vendedor-de-biblias, la contadora pública-mesera, el comunicólogo-bibliotecario, la bibliotecóloga-recepcionista, uf, ¿le sigo?). ¿La solución? -Que nadie ose ir a la universidad, a menos que tenga una AUTÉNTICA vocación profesional y académica. Los demás, que se dediquen a trabajar tan pronto egresen de la secu o de la carrera técnica. Así de simple. Por cierto, y aunque a nadie le importa, me llamo Andrés Rodríguez Martínez (no "anónimo").

Nadie dijo...

Andres:

Siempre he propuesto dos pilares fundamentales que sustentan mi opiniòn sobre la educaciòn pùblica en Mèxico:

1) Que el enfoque de la educaciòn privada superior sea cientìfico (ciencias sociales incluìdas, por supuesto) o de alta tècnica (ingenieril).

y

2) Que la educaciòn superior privada sea una meritocracia pura y elitismo intelectual verdaderamente duro. Cuando digo esto, pienso en Japòn.

Al hacer de estos dos puntos los pilares nos aseguramos de que las empresas saquen sus garras de los programas de estudios y mejor financien a la escuela tècnica (o sea, màs o menos estamos de acuerdo).

Por otro lado, es indispensable gastar màs en ciencia y tecnologìa y màs en educaciòn en todos sus rubros. Es falso que ningùn paìs haya hecho de la educaciòn privada su pilar y se haya convertido en un paìs de primer mundo en consecuencia.

Las experiencias coreana, hindù, japonesa, española, alemana y hasta la gringa apuntan en sentido contrario a estos dichos.

Te recomiendo que investigues sobre el trato del Banco Mundial con Fox, en donde nos endeudamos con el BM para crear un fondo que financia a la educaicòn privada....

Lana del gobierno para el CNCI, la UNITEC... que chida la respuesta panàtica al problema de la educaciòn no?

Pagar favores electorales. Que viva fecal.

Anónimo dijo...

al anonimo (no se si sea andres) que no sabe para que se necesita la investigacion...

no se que edad tengas o tu escolaridad, si aun no llegas a la universidad no sigas leyendo, ya creceras, estudiaras y cambiara tu opinion...

si ya cursaste tus estudios y aun no sabes para que sirve la investigacion, te invito a alguna de las bibliotecas de nuestra maxima casa de estudios, y te pongas a leer... por ejemplo en ciencias (biologia, quimica, medicina, fisica, etc.) la mayor parte de los conocimientos que puedas adquirir, se los debes a la investigacion...

tu crees que es por conocer por conocer?? yo mas bien quiero creer que es: primero, conocer para dejar de ser tan ignorantes (en el tema que estudies, nunca vas a conocer todo lo habido hasta este momento)
segundo, conocer para buscar aplicaciones... que si no lo sabes hay muchas, solo que no te interesa buscar; simplemente en medicina, no sabes todos los avances que se logran gracias a la investigacion basica

no me respondas, no creo volver a este blog ya que lo encontre de casualidad y a base de, facil, unos 20 links; solo espero que te hayas puesto a pensar y que te des cuenta que un pais sin investigacion, sin educacion o sin cultura, no es nada

saludos