lunes, noviembre 26, 2007

Jesusa Rodríguez habla de los "campanazos"

Los compañeros del grupo de Resistencia Creativa del DF nos envían una carta electrónica que a ellos les hizo llegar ayer la actriz Jesusa Rodríguez. En su carta, Jesusa hace algunas precisiones en torno al incidente del domingo 18, cuando desde la Catedral de la Ciudad de México se intentó acallar con "campanazos" a la senadora Rosario Ibarra, a lo que supuestos obradoristas respondieron en forma inadecuada, con la subsecuente difusión exacerbada y distorsionada de los hechos por parte de los medios de difusión.

Queridos compañeros de la resistencia:

Hoy, noviembre 25 de 2007, les pido una disculpa por no poder asistir al Hemiciclo, pero como ustedes saben soy actriz y hoy tengo una función a las 12:30, éste es un compromiso de trabajo que no puedo eludir.

Me veo en la necesidad de escribir este mensaje, porque creo que los acontecimientos del domingo 18 de Noviembre en el Zócalo nos deben servir para lo que será la lucha de aquí en adelante, pues conforme nuestro movimiento avance en la defensa del país, seremos más atacados.

Es bien sabido que la provocación y la infiltración son la mejor estrategia con la que cuenta y ha contado la derecha para dañar los movimientos sociales. Esta es una estrategia muy útil porque nunca se puede demostrar la provocación, ni señalar exactamente al infiltrado.

En el caso de nuestro grupo, hay dos personas a las que quiero aludir, porque desde hace meses han venido dañando al movimiento con su actitud. No podemos saber si ellos son infiltrados de Gobernación o simplemente son personas que no saben comportarse en una lucha social, en cualquier caso, no conviene que nosotros sigamos ingenuamente dejando que dañen la imagen de la resistencia y la de nuestro presidente legítimo.

La primera persona a la que me referiré es a Julia Klug, a quien desde hace meses yo le pedí personalmente que se disciplinara y actuara en coordinación con todo el grupo, sin embargo ella siguió haciendo acciones aisladas hasta el ya famoso rodeo de la camioneta de Norberto Rivera y las consecuencias conocidas que de ahí se derivaron. Ustedes recordarán que en esa ocasión dijimos en una reunión en el Hemiciclo que quien se acercara a Catedral sería inmediatamente considerado un provocador.

La segunda persona a la que aludiré es a Juan Carlos Escandón, quien también desde hace tiempo ha sido señalado como alguien que no es sincero en sus acciones, ni en su conducta hacia el movimiento.

Yo sé que ha pedido dinero en mi nombre -yo nunca he pedido dinero ni siquiera en mi propio nombre-. También me han dicho que ha manejado información y dinero de la resistencia en forma poco clara.

Ahora es señalado directamente por el GDF como quien instigó a quienes irrumpieron en Catedral (ver el Universal, 20 de noviembre de 2007).

El 22 de noviembre vuelve a aparecer en el Universal pidiéndole perdón a Norberto Rivera, junto al abogado de la arquidiócesis, y diciendo que el nunca estuvo en Catedral el domingo, entonces ¿porqué le pide perdón a Norberto Ribera y porqué éste a su vez dice que ya lo perdonó.

A quien realmente debería pedir disculpas este señor es al movimiento de resistencia y retirarse de esta digna lucha, pero como creo que no lo hará, pienso que lo mejor es no volver a admitirlo en este grupo y deslindarnos de las acciones que el realice en nuestro nombre.

Compañeros, desde mi punto de vista la provocación de las campanas es mas que evidente (como los medios no hablan de las personas extrañas que estaban en los campanarios, vean la foto en Astillero de la Jornada el día 21 de noviembre) pero no podemos esperar otra cosa de la jerarquía católica como no sea tirar la piedra y esconder la mano, su esencia es la hipocresía.

La utilización que han hecho en los medios de la irrupción en Catedral, es por decir lo menos inmoral, pero tampoco podemos esperar menos de un grupo de cínicos que además de lucrar con la fe, sustentan su poder en la impunidad y el encubrimiento.

Lo que sí está en nuestras manos es evitar caer en provocaciones y aprender a marginar a los infiltrados o a las personas que por su carácter, conducta o reacción ante las provocaciones no deben formar parte de este movimiento que intenta enfrentar grupos de poder sin escrúpulos.

Quiero ser muy clara: aquí no vamos a satanizar a nadie, porque aquí no creemos que ningún ser humano merezca la tortura eterna de ningún infierno.

A lo que quiero llegar es que aprendamos de lo que ocurrió el domingo –que por fortuna no fue nada grave- que no permitamos que nadie nos empuje a la violencia, y que sepamos señalar a quien lo haga, sea por su carácter o sea por que está siendo pagado para hacerlo.

Que esa gente no encuentre tierra fértil en donde sembrar ni la violencia ni la cizaña entre nosotros.

No dejará de haber infiltrados en este movimiento, al contrario, la derecha cuenta con esas armas. Cada vez habrá más provocadores y provocaciones en eso son expertos los enemigos del pueblo, pero éste es el único capaz de revertir esas estrategias en contra de los propios instigadores, sabiendo conducirse con intuición, con inteligencia y con claridad a través de la no violencia, como lo han hecho otros pueblos en lucha por sus derechos.

Compañeros, vienen retos aun mayores, la defensa del maíz y del petróleo valen todo lo que tengamos que enfrentar, hagámoslo cada vez más con lucidez y serenidad.

Su amiga y compañera en resistencia:
Jesusa Rodríguez.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Violencia y decadencia de Mexico.Esta es la herencia del pejismo

Anónimo dijo...

La acusación a Julia Klug me parece injustificada. Su sola historia le da derecho a protestar sin pedir permiso (fue violada por un sacerdote a los 7 años). Es cierto que no podemos caer en provocaciones, ni creo que la violencia sea la solución, pero basta revisar la historia para saber que la radicalización de los movimientos sociales se da cuando todas las demás puertas se han cerrado, y haríamos bien en no perder de vista quién cerró esas puertas.

Gerardo de Jesús Monroy dijo...

Hildebrando:

Gracias por tu comentario. Como sabes, porque lo he dicho aquí, hace años que no vivo en el DF, y no estoy bien enterado de mucho de lo que ocurre allá, hacia adentro del movimiento. Lo de la dura niñez de Julia sí lo sabía, y, sin embargo, por mi torpeza y por mi mala memoria no relacioné esa circunstancia a su nombre; es decir: había olvidado que era ella a quien habían violado. Por eso te agradezco, por recordármelo; y no sólo a mí: te agradezco por recordarlo a los que leen el blog.

Estarás de acuerdo conmigo, sin embargo, en que era necesario que los blogs que apoyamos a AMLO permitiéramos a Jesusa Rodríguez expresar su visión de los hechos, aun si esta visión es injusta. Y si es así, si hay injusticia, los compañeros aludidos por ella pueden confiar en que también serán difundidas sus palabras, al menos en El pedote de FeCal y en La Hora del Pueblo. Y si las relaciones internas del movimiento se volvieran más tensas, buscaríamos que más personas se enteraran de lo que Julia y Juan Carlos tienen que decir.

Como expresé en el post al que lleva el link que ves más arriba, lo que ocurrió el domingo es, en realidad, un incidente de poca importancia que se ha exagerado descomunalmente, gracias a dos hipocresías cómplices: la de los medios de difusión, más la de la Catedral, con sus chillidos increíbles de "víctima". En Catedral no hubo daños a seres humanos ni a bienes de la Iglesia, ni se dañó el inmueble; la verdad es que, contrariando la forma en que presentaron el evento los periódicos: ¡no hubo violencia en Catedral! No hubo nada digno de ser reseñado. Salvo, quizá, el irregular toque de las campanas.

Esto nos ha puesto en una situación muy difícil, porque ahora hay desconfianza entre nosotros mismos. Somos nosotros los que hemos de dar explicaciones. A la Iglesia, nadie (salvo Carmen Aristegui y algún otro) se ha atrevido a preguntarle a qué se deben los campanazos (que no campanadas).

Literalmente: la Iglesia está cerrando sus puertas.

Anónimo dijo...

Este embrollo ha sido conveniente magnificado y manipulado con quién sabe oscuros intereses. Es injusto que se satanice a alguien y particularmente a Julia. Yo no me considero provocador o infiltrado pero creo que ni el PRD ni la CND tenían que comprar esta bronca gratis.

marichuy dijo...

Erat

¡Y con la Iglesia hemos topado!

PS Y hablando de ultraconservadores y reaccionarios, la iglesia y el PAN nos quieren llevar de regreso al Siglo XVI.

Un abrazo

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo con Marichuy, los panistas no se cansan de mostrarse retrógrados, ignorantes e intolerantes y para muestra un botón (mi pésame para los neoleoneses):

"Impulsa el PAN-Nuevo León 'ley que atenta contra el Estado laico'"

http://www.jornada.unam.mx/2007/11/28/index.php?section=sociedad&article=046n1soc

Aviso importante: se necesita de un estómago muy fuerte para leer este artículo.

Gerardo de Jesús Monroy dijo...

Gracias a todos, por sus comentarios.

Hay una excelente "caricatura sin monitos" de Francisco A. Servín donde este articulista coincide con lo que expresaba Hildebrando: AMLO y la CND se equivocan al volver las espaldas a sus seguidores y caer en el juego de Norberto Rivera. Les recomiendo leerla aquí.

marichuy dijo...

Erat

¿Donde anda usted? Se extrañan sus escritos; en especial yo extraño los de su otro blog, los de su fase poética.

Un abrazo,
la latosa de Marichuy